Es imposible saber a ciencia cierta qué cantidad de abortos se realizan en el país. Cada vez hay más abortos tempranos (producidos en los primeros días de la gestación) que son imperceptibles, incluso, para la mujer que aborta. Sobre la cantidad de abortos que se realizan existen pues estimaciones, realizadas en base a los egresos hospitalarios por complicaciones de aborto.
Esas estimaciones distan, en certeza, de las estadísticas que existen sobre mortalidad materna. Al referirse a ellas los abortistas mencionan que “la clandestinidad del aborto genera subregistros”, pero éstos no exceden, según sus propios cálculos, al 9,5% (Informe sobre Mortalidad Materna del Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES). Lo que nos permite afirmar que ese subregistro no varía demasiado las conclusiones a las que podemos arribar utilizando las cifras oficiales.
Cantidad de abortos.
Las últimas “estimaciones” oficiales sobre la cantidad de abortos que se realizan en el país fueron publicadas en octubre de 2007 por el Ministerio de Salud de la Nación, en ese momento a cargo de Ginés González García. Están consignadas en la Guía Técnica para la Atención Integral de los Abortos No Punibles, meras instrucciones, sin peso legal alguno, con las que Graciela Ocaña, actual ministra del área, se ha manifestado en desacuerdo (Página 12, 7/07/2008). De todos modos y por carecer de fuentes posteriores utilizaremos el número de abortos estimados en esa Guía, que son: 460.000.
Número de muertes por aborto.
Las últimas cifras disponibles son las del año 2006 y fueron publicadas en diciembre de 2007 por el Ministerio de Salud de la Nación, tras asumir Graciela Ocaña. Según esas “Estadísticas Vitales”, en el 2006 se produjeron:
- Muertes maternas: 333 (son las muertes acaecidas durante el embarazo, parto o puerperio –hasta 42 días después del parto-).
- Muertes maternas por aborto: 93 (la publicación no discrimina entre abortos “seguros”, “inseguros”, espontáneos o inducidos).
Analizando las cifras.
Sin dejar de reconocer el valor de cada vida humana –única e irrepetible- y la gravedad de su pérdida, no podemos dejar de destacar que el número de muertes relacionadas con el aborto provocado es abrumadoramente superado por el de muchas otras causales de muerte, incluso, por el número de víctimas fatales de la inseguridad.
Consignemos, a modo de ejemplo, que las mismas estadísticas oficiales señalan que en el 2006 hubo 93 muertes por aborto, 462 suicidios de menores de 19 años y 8.986 defunciones de menores de un año (en su mayoría por causas evitables).
El 40% de los argentinos es asesinado antes de nacer.
Como anticipamos, según las estimaciones de la Guía Técnica elaborada por el Ministerio de Salud durante la gestión del ex ministro de salud Ginés González García, se producen alrededor de 460.000 abortos inducidos al año. Si comparamos esa cifra con la cantidad de nacimientos (aproximadamente 700.000) observamos que el 40% de los argentinos es asesinado antes de nacer. Dicho de otro modo: cada cinco argentinos por nacer se mata a dos.
Cada 5000 niños por nacer asesinados muere una madre.
Si comparamos esa misma cifra (460.000 abortos inducidos al año) con las 93 muertes por aborto; surge que de cada 5000 mujeres que se practican un aborto, una muere. O lo que es lo mismo: cada 5000 niños por nacer asesinados muere una madre.
Conclusión.
No hay políticas públicas, ni campañas en los medios de comunicación, ni proyectos legislativos –salvo honrosa excepción- que intenten reducir esas 5000 muertes. Frente a un problema que involucra 5001 muertes, se intenta remediar la una, ignorando las 5000 restantes. Para los que bregan por la legalización de aborto de esas 5001 vidas, 5000 carecen de valor.
Lic. Mónica del Río, Cristo Hoy, 9.10.08.