martes, 1 de diciembre de 2015

A propósito del “mal menor”, argumento tan utilizado por algunos frente a las elecciones.




El principio moral de que es lícito elegir un mal menor vale en determinados casos, por ejemplo el de la “legítima defensa”, “servato moderamine inculpatae tutelae”, como dicen. No vale en todos. En el caso de conciencia propuesto por el film El mar no perdona, por ejemplo, el capitán del bote salvavidas que da muerte directamente a algunos de los náufragos para salvar al resto, procede inmoralmente.
En el caso de error, no se puede elegir el “menor error”. ¿Cuál es el menor error? ¿Por ventura el error mezclado con verdades? Esos suelen ser los más perniciosos…El liberalismo es un error. ¿Puedo elegir el liberalismo para alejar al comunismo? No. Debo rechazarlos ambos. El error es el mal más grande del hombre. El liberalismo es pecado, escribió Sardá y Salvany, un librito muy útil para la Argentina que habría que proponerle a Emecé.
Si hay una discusión entre siete hombres, uno de los cuales dice que dos más dos son cuatro, otros tres dicen que dos más dos son cinco, y los tres restantes que dos y dos son cuatrocientos, ¿deberá el primero ponerse de parte de los del cinco porque es un error menor? Aquí en la Argentina muchísimos se pondrían de inmediato, sobre todo si les dan a ellos 5 por cada 2 y 2”.


R.P. Leonardo Castellani, “El mal menor”, febrero de 1958.