martes, 1 de noviembre de 2011

Cinco mil católicos marchan en París contra la cristianofobia y las obras blasfemas.


El evento organizado en París, este sábado (29 de octubre de 2011), por Civitas con el apoyo de diversos movimientos y asociaciones católicas ha sido un gran éxito, con cerca de 5,000 personas -en su mayoría jóvenes- recorriendo las calles de la capital francesa bajo la lluvia, detrás de una pancarta que indica “Francia es y debe seguir siendo católica”. En la marcha participaron  también diversos sacerdotes.

Esto fue para denunciar los ataques de odio y desprecio sufridos por el cristianismo y la figura de Cristo en la comunidad llamada “cultural”, la cristianofobia en general y particularmente contra las obras de teatro blasfemas, tanto la exhibida como otra que se pretende presentar.

Fue un largo paseo digno, donde hubo consignas, cantos y oraciones. Las cifras de los manifestantes superaron las estimaciones que  se calculaban en cientos y no en miles de participantes.

La prefectura desvió el curso del evento, hacia un lugar estrecho, muy lejos de donde se llevó a cabo la blasfemia.


Evento improvisado posterior a la marcha.

Culminada la marcha y tras vigorosos discursos, entre ellos de Alain Escada, secretario general de Civitas, y del abad de Cacqueray (FSSPX), la manifestación se dispersó.

Después, varios de esos participantes llevaron a algunos grupos a la Place du Châtelet, con ganas de protestar contra el teatro, donde la obra se desarrolla, ante la presencia de Frédéric Mitterrand, “el ministro de Cultura”.

El primer grupo de jóvenes católicos llegó ahí pacíficamente, pero tuvo que dar marcha hacia atrás pues la Compagnies Républicaines de Sécurité de la Policía Nacional de Francia los recibió arrojando gas lacrimógeno contra la multitud, sin perdonar ni  siquiera a los sacerdotes presentes. 

Con gran tensión, frente a frente, los católicos se arrodillaron y comenzaron virilmente a rezar el rosario. Los sacerdotes se encontraban en la primera línea al frente de los fieles. 

Otros grupos de los manifestantes llegaron después (alrededor de 400 personas en total), y de nuevo se hizo lo mismo que la noche anterior: oraciones, cantos y lemas, durante dos horas antes de la dispersión general a las 23hrs.

Como dato curioso informamos que durante la marcha, un grupo de musulmanes del Centro Zahra (chiítas) simpatizó con los católicos y  se les se unió, lo mismo hizo en el evento improvisado en la Place du Châtelet, un pequeño grupo de islamistas de “Forsan Alizza”.


Ver video del evento inprovisado en el Place du Châtelet:



Visto en el Blog Catolicidad.