La paz del no conflicto armado, la paz sentimental, esta paz del mundo totalmente adversa a la paz de Cristo que busca
esquivar cualquier combate con los enemigos del alma y de Dios, que busca no
confrontar con palabras contundentes y definitorias la Verdad y la mentira, hoy se predica desde las más
altas jerarquías y se ve confrontada –quizás simbólicamente- por los animales,
como en fábula que presenta en vivo y en directo el Creador.